"Garbancito y otros cuentos" es el título de la exposición que organizan Alicante Cultura, la Fundación Cajamurcia y Kalandraka en el Centro Municipal de las Artes (Plaza de Quijano, 2). Estará abierta al público desde el 2 de diciembre hasta el 25 de enero de 2012, en horario de lunes a viernes de 09:00 a 14:00 horas, y de 16:30 a 21:30 horas.

A la inauguración asistieron el teniente alcalde de Cultura de Alicante, Miguel Valor, representantes de Cajamurcia, Cesáreo Martínez, de Kalandraka, y el ilustrador Pablo Auladell. Los primeros visitantes de la muestra fueron un centenar de escolares del Colegio Inmaculada, pero el calendario ya contempla una amplia agenda de visitas de estudiantes.

GARBANCITO (Collage. Kalandraka, 2008).

LA VERDADERA HISTORIA DE CAPERUCITA (Técnica mixta. Kalandraka, 2004).

MARC TAEGER (Berna, 1963). Artista polifacético, su obra se expuso en diversos países y recibió galardones como el Premio Daniel Gil por "La verdadera historia de Caperucita". También publicó "Aquiles el puntito", "Garbancito", "Tic-tac" y "Arturo".

CHIVOS CHIVONES (Técnica mixta. Kalandraka, 2004).

FEDERICO FERNÁNDEZ (Vigo, 1972). Recibió el Premio Nacional de Ilustración 2001 por el libro “ ¿Dónde perdió Luna la risa? ”. Licenciado en Bellas Artes, participa en proyectos de escenografía musical y en exposiciones de pintura y grabado. Entre otras de sus obras publicadas destacan “Don Agapito el apenado” y “Chivos chivones”.

LOS SIETE CABRITILLOS (Modelado en plastilina. Kalandraka, 2000).

ANA MÍGUEZ y SOFÍA F. RODRÍGUEZ (Soutomaior y Pontevedra, 1968). Licenciadas en Bellas Artes, son profesoras de dibujo en enseñanza secundaria. Participaron en varias exposiciones de pintura, grabado, fotografía y videocreación. De “Los siete cabritillos” se han publicado 5 ediciones.

LA RATITA PRESUMIDA (Instalación de Rodorín / Pablo Mestre. Kalandraka, 2002).

PABLO MESTRE (Valencia, 1970). Diseñador. Estudió Ingeniería Técnica y Diseño Industrial y trabajó en la Escuela Gençana de Valencia. Ha colaborado con diversos artistas plásticos en la realización de proyectos editoriales. “La ratita presumida” fue su primer álbum ilustrado.

EL POLLITO DE LA AVELLANEDA (Técnica mixta. Kalandraka, 2008).

LOS CUATRO AMIGOS (Técnica mixta. Kalandraka, 2010).

GABRIEL PACHECO (México DF, 1973). Graduado en Escenografía, recibió numerosos reconocimientos nacionales e internacionales como el Premio Internacional de Libro Ilustrado de México (2000 y 2002), y este año está nominado al Premio Astrid Lindgren de Literatura Infantil. Entre sus obras figuran “El pollito de la avellaneda”, “El hombre de agua” o “Los cuatro amigos”.

EL REY OSO BLANCO (Técnica mixta. Kalandraka, 2010).

EL PEQUEÑO CONEJO BLANCO (Gouache. Kalandraka, 1999).

ÓSCAR VILLÁN (Ourense, 1972). Licenciado en Bellas Artes, por su primer libro ilustrado, “El pequeño conejo blanco”, recibió el Premio Nacional de Ilustración 1999. Entre su obra publicada destacan “La cebra Camila”, "La mora”, “El Rey Oso Blanco”, “Un bicho extraño” y la colección “De la cuna a la luna”.

LA CASITA DE CHOCOLATE (Técnica mixta. Kalandraka, 2008).

PABLO AULADELL (Alicante, 1972). Ilustrador que ha recibido diversos galardones nacionales e internacionales, como el Ciudad de Alicante. Suyas son las imágenes de las obras “La casita de chocolate”, “Diógenes” y el recién publicado “Rasmus y el vagabundo”.

Los cuentos tradicionales han llegado a nosotros desde muy lejos. Sus orígenes se remontan a la noche de los tiempos, cuando los bosques cubrían toda la extensión de lo conocido y eran el abrigo y el hogar de la humanidad que aún no escribía historias. Pero sí las contaba, las transmitía oralmente, de padres a hijos, de hijos a nietos, como el patrimonio de la tribu: ritos de iniciación, salmodias para ahuyentar a los malos espíritus, fórmulas para amansar la naturaleza.

Así, siglo tras siglo, el eco de la memoria ha resonado en humildes cabañas, se ha quedado a vivir al amor de la lumbre en las casas campesinas, ha visitado los palacios más selectos y, finalmente, se ha hecho urbano y se ha adentrado, incluso, en las aulas universitarias.

Los escritores europeos los transformaron en literatura: Perrault convirtió a Chaperon Rouge en mito, los hermanos Grimm «encontraron diamantes entre la hierba» y los mostraron en sus Cuentos para la infancia y el hogar. Los folcloristas románticos reivindicaron la voz del pueblo, y en toda Europa (Afanásiev en Rusia, Calvino en Italia, Rodríguez Almodóvar en España) los recopiladores se encargaron de ordenar y clasificar toda la exuberante riqueza oral que no ha dejado nunca de manar desde la gran fuente de la palabra compartida.

No es de extrañar, pues, que los grandes pintores e ilustradores, a lo largo de las épocas, se hayan inspirado en los cuentos populares para crear obra o ilustrar libros: desde Doré, que iluminó con sus grabados los Cuentos de la Mamá Oca de Perrault, pasando por los que ilustraron los cuentos de los Grimm, hasta el maestro Roberto Innocenti, que nos presentará muy pronto a la siempre joven (pero eterna) Caperucita. Los artistas plásticos han sido subyugados por la fuerza y frescura de la cultura popular.

En esta exposición, ocho artistas nos muestran su particular visión de los cuentos tradicionales. Están representadas las tres categorías que forman el corpus de los cuentos clásicos: de animales, de costumbres, y maravillosos. Están también representadas distintas técnicas de ilustración: los collages de Marc Taeger, los acrílicos de Federico Fernández y Óscar Villán, los montajes fotografiados de Pablo Mestre, Ana Míguez y Sofía Rodríguez, y las propuestas digitalizadas de Pablo Auladell y Gabriel Pacheco.

Todos los artistas han puesto su buen hacer al servicio de la cultura popular para transformarla en estos libros que hoy se pueden ver, leer y tocar. Esperamos que sus ilustraciones os inviten a seguir transmitiendo la voz de la memoria para que la gran fuente de la tradición oral nunca deje de manar.

Xosé Ballesteros, DIRECTOR DE KALANDRAKA.