El señor Garrigós debió ser un hombre sensible con las plantas y los animales, gran admirador y fiel defensor del equilibrio con la Madre Naturaleza. Por eso le honra su sincera amistad con un caracol, al que acogió en su jardín de geranios, con el que compartía largos monólogos y al que alimentaba con deliciosas hojas de lechuga. Así le recrea, al menos, de forma literaria y emotiva, su amigo José Luis Berenguer en esta obra, aderezada con las imágenes de Federico Delicado. Autor e ilustrador presentaron “El caracol del señor Garrigós” (FAKTORÍA K) en Alicante.

Entre el público, educadores de los colegios El Faro, Voramar, Mediterráneo, Aire Libre, Els Xiquets, Óscar Esplá y Figueras Pacheco, entre otros. También asistieron profesores de la Facultad de Educación, bibliotecarios de Alicante, escritores, artistas plásticos, y narradores. Gracias a todos.

No faltaron familiares de Fidel Garrigós, a quien el autor dedicó el libro en homenaje a su figura, transcurridos dos años desde su pérdida. Garrigós y Berenguer compartieron horas de trabajo, sueños y diversión bajo sus respectivos alter ego, Don Mégano y Don Sétano. Una grabación de su última actuación juntos fue la nota entrañable de la presentación, que se completó con la participación del ilustrador Miguel Ángel Díez haciendo una interpretación de las ilustraciones de Federico Delicado. Desde Magritte, pasando por Hopper, Man Ray o Marceau, las páginas de “El caracol del señor Garrigós” están estratégicamente salpicadas de guiños a las obras más emblemáticas de estos artistas.